Trucos de belleza para el rostro.

Limpiadora casera. Para limpiar el rostro de células muertas e impurezas, se debe preparar una crema con una clara de huevo, una cucharada de yogur natural y dos cucharadas de harina de avena. Se mezcla todo muy bien y se aplica sobre el rostro, luego se da un suave masaje con la yema de los dedos y se retira con agua tibia.

Cutis fatigado. Un cutis fatigado se puede revitalizar con la siguiente mascarilla. Mezclar una cucharada sopera de aceite de oliva con dos de sal y aplicar la preparación sobre la cara mediante suaves masajes circulares. Pasados unos 20 minutos, se debe retirarla.

Piel reseca. Si se tiene la piel reseca y estropeada por el sol o el viento, se puede limpiar dos veces por semana el rostro con aceite de almendras. Luego, se lava con jabón de coco, glicerína o avena mediante masajes suaves. Por último se limpia bien con una toalla húmeda y se seca el rostro sin frotarlo.

Pieles grasas sin brillos. Para que el brillo que produce la grasa sobre el rosro no dañe el maquillaje, existe un truco de belleza excelente que consiste en mezclar una cucharada de arcilla con té concentrado de bardana, Se aplíca en el rostro y se deja actuar durante 10 minutos.

Cutis enrojecido. Si se tiene el cutis enrojecido, existe un truco de belleza que puede solucionarlo el cual consiste en disolver extracto de manzanilla en agua caliente, empapar con ésta una toalla y aplicarla durante un minuto sobre el rostro. Empapar una segunda toalla en agua fría, a ser posible agua helada, y sustituir la toalla anterior, también durante un minuto. Repetir toda la operación tres veces, terminando con la compresa fría.

Poros dilatados. Existen varios trucos de belleza para cerrar los poros dilatados que se describen a continuación:

Añadir a la crema para el cutis unas gotas de zumo de limón, remover a fondo y aplicar como máscara, dejando que actúe un rato. A continuación se quita con agua templada, pero suavemente y sobre todo evitando «rascar» los poros. Una variante del truco anterior consiste en batir un huevo y añadirle media cucharadita de zumo de limón. Luego debe extender esta mezcla por todo el rostro, evitando el contorno de de los ojos y labios; mantenerlo unos veinte minutos y después aclarar con agua templada. Se recomienda aplicar este truco durante la noche, ya que de día los rayos del Sol en conjunto con el limón pueden manchar la piel. Mezclar una parte de cuajada sin grasa con dos partes de suero de leche y aplicar como máscara durante un cuarto de hora, luego limpiar con agua templada teniendo en cuenta las mismas precauciones señaladas anteriormente. Aplicar en el rostro una mascarilla de arcilla. Se deja por 10 minutos, se retira con agua fría y se pone, finalmente, un astringente.